jueves, 10 de julio de 2025

EDITORIAL JULIO 2025

Sin duda alguna, el mundo vive un momento crucial en el cual el derrumbe del viejo modelo de imposición del bloque imperialista EE.UU -U.E. está siendo cuestionado y confrontado por el bloque imperialista emergente dirigido por China - Rusia.

Esto es el punto más visible de la contradicción inter imperialista en la coyuntura actual, aunque existen otros puntos de contradicción dentro de cada bloque, así como puntos de conexión entre potencias y juegos de oportunismo.

La contradicción entre las potencias imperialistas y los países dependientes también está en auge porque no es posible que algún país entregue su independencia, soberanía y riquezas a una potencia imperialista sin que las fuerzas más sanas hagan resistencia y obliguen a los gobiernos a buscar, así sea solo de forma declarativa, la defensa de los intereses nacionales.

Esta contradicción genera problemas a lo interno de las grandes potencias imperialistas que en general se han constituido sobre la opresión de nacionalidades y etnias, que con frecuencia reclaman un papel en el quehacer político y social. Por otra parte, las potencias imperialistas buscan expandir su área de influencia y se ven obligadas a confrontar focos de resistencia naturales o promovidos por otras potencias imperialistas o monopolios antagónicos en áreas específicas.

Luego está la contradicción entre el trabajo y el capital, elemento esencial de la sociedad capitalista, que aflora permanentemente y provoca conflictos, huelgas y choques violentos entre la burguesía y el proletariado, independientemente si el capital es nacional o internacional, de uno u otro bloque.

Esta contradicción fundamental nos coloca en el punto central para la organización del proletariado revolucionario, ya que debemos librarla con las fuerzas propias de la clase obrera y los aliados inmediatos, jamás tendrá a la burguesía de este lado y temporalmente podrá contar con la pequeña burguesía, si le conviene a sus intereses coyunturales.

La burguesía trata de ocultar estos puntos de vista y quiere hacernos ver que los conflictos son motivados por ideas religiosas, étnicas o nacionalismos, pero siempre trata de ocultar la esencia de clase, por esa razón los comunistas marxista leninistas somos reiterativos en buscar la explicación de esos fenómenos con la herramienta científica del materialismo dialéctico y no con concepciones idealistas que buscan mantener la explotación y control del capital sobre el trabajo.

Estas contradicciones las vivimos también en nuestro país. 

Cada cierto tiempo se exacerba una u otra, pero siempre está presente el interés de la burguesía tratando de aumentar el control sobre los explotados, por la vía ideológica, tanto como por la represión.

LOS PUEBLOS EN REBELDÍA Y LA LUCHA CONTRA EL FASCISMO

Por: S. Montes

Las luchas de la clase obrera, de los trabajadores, de los pueblos en resistencia y brega, alzan sus voces y acciones revolucionarias contundentes contra el capital financiero, contra la burguesía reaccionaria, que los explota, los oprime, humilla, y que en la actualidad como en el pasado, aplican medidas fascistoides, pretendiendo controlar las manifestaciones de los pueblos del mundo, que con su energía latente de proletarios, su rebeldía, ímpetu y valentía, les demuestran sin vacilación su determinación firme y victoriosa  en la lucha.

Esa fuerza combativa que ha demostrado a través de la historia de los movimientos revolucionarios, que cuando la lucha de clase va rebasando su medida, los resultados dialécticos en cantidad y en calidad, va generando cambios significativos para profundizar los procesos revolucionarios, el avance de los proletarios del mundo.

Son estas sendas revolucionarias que van reafirmando en la teoría y la praxis lo acertado del Marxismo- Leninismo, con su Materialismo Dialéctico, su Materialismo Histórico, estudiado y aplicado por los camaradas Marx, Engels, Lenin y Stalin, en diferentes etapas y escenarios contra el capitalismo en sus épocas. Y que ahora se observa cómo esos preceptos se encienden, viven y continúan en la lucha de ese proletariado que día a día adquiere mayor conciencia contra su enemigo de clase, el capitalista, el imperialista y el fascismo; esta última como amenaza de la humanidad en los tiempos actuales.

Camaradas, amigos, colaboradores, simpatizantes, estamos convencidos de que de estas contiendas contra el fascismo, los trabajadores, la clase obrera, los pueblos en rebeldía, los Partidos y Organizaciones Marxistas Leninistas, saldrán cada día cualificados para consolidar los Frentes Antifascistas en cada país, Instrumento organizativo y de combate que permitirá seguir las batallas contra esta amenaza, y lograr las victorias proletarias y populares de los pueblos que siguen resistiendo y luchando.

             “La construcción del Frente Antifascista Nacional e Internacional, es la tarea”


EL IMPERIALISMO EN SU FASE ACTUAL DE DESCOMPOSICIÓN

Por: R. Marín
La descomposición del imperialismo es una consecuencia propia del surgimiento, auge y caída que se presenta en cualquier modo de producción como fases propias de su desarrollo dialéctico. 

El capitalismo no escapa de ese proceso dialéctico que permitió su surgimiento como capitalismo de libre concurrencia, su paso a capitalismo monopolista o imperialismo, en su fase superior, y luego su proceso de descomposición y caída, que vive actualmente.

Esos procesos no son de corto plazo, ya que los fenómenos sociales se desenvuelven en períodos de siglos y milenios, pero al analizar los procesos sociales con el instrumento científico del materialismo histórico dialéctico podemos comprenderlos a plenitud y en movimiento, percibiendo el pasado, presente y pudiendo valorar su futuro.

La descomposición del capitalismo, en su fase superior, el imperialismo, está expresada en diversas formas de la crisis general y crisis económicas cíclicas, que van provocando un aumento de la agudización de las contradicciones fundamentales, expresadas en las guerras, como las estamos viendo en Europa, África y Asia, pero no podemos olvidarnos que todo esto también es caldo de cultivo para las revoluciones, que los comunistas marxista leninistas debemos organizar y promover en todas partes donde hagamos presencia, las cuales, a veces de forma sigilosa o incomprensible, van dando pasos indetenibles.

Esas realidades complejas y diversas las podemos percibir hoy en los distintos puntos de conflicto; económicos, políticos, sociales y militares que nos rodean, también en el aumento de las luchas de resistencia que los pueblos, las capas oprimidas y especialmente el proletariado venimos librando para enfrentar la arremetida violenta del gran capital, especialmente del capital financiero, que en todas partes trata de imponer su dominio global sobre otras fracciones capitalistas, internacionales, nacionales o del capital industrial, agrario o comercial, imponiéndose, como es típico de la fase imperialista del capitalismo, el avance del capital financiero, mediante la exportación de capitales sobre la exportación de mercancías, las pugnas por el reparto de mercados y la lucha por el reparto del mundo ya repartido en anteriores confrontaciones.

Gran parte de los conflictos inter imperialistas de hoy están dados por esta contradicción, ya que los capitales de ambos bloques imperialistas, pero especialmente los de EE.UU y China principalmente se confrontan para adueñarse de los mercados y en algunos casos pretenden llevar la rueda hacia atrás, de forma irracional y reaccionaria, como ejemplo cuando el grupo de Trump pretende traer las industrias manufactureras de nuevo a territorio estadounidense.

EL FRENTE ÚNICO CONTRA EL FASCISMO

Por: S. Montes

Hoy es oportuno y necesario, un espacio político, organizativo y de combate, donde los obreros y los trabajadores de la ciudad y del campo, se encuentren y se aglutinen, los distintos sindicatos, delegados de prevención, y cualquier expresión organizativa de los trabajadores para dar el paso a la conformación de un Frente Único de la clase obrera, un Frente del proletariado. Éste como instrumento de clase, donde la lucha vaya en dos direcciones: la primera es la defensa por salarios dignos, por la seguridad laboral, y otros beneficios reivindicativos del proletariado y segunda, hacer frente a la dictadura fascista, a la ofensiva del capital y del imperialismo que cada vez se impone en América Latina y el mundo.

En cada espacio de trabajo, empresa, institución, las diferentes formas organizativas de la clase obrera organizada y con la visión y con el interés de la clase proletaria, deben promover el debate y las acciones concretas, contra el capitalista opresor y explotador, responsable cada día de la pauperización de miles de trabajadores y de sus familias. Y también visualizar y combatir la AMENAZA actual, no solo de la clase obrera, sino de la humanidad. El Fascismo, que no es más que la dictadura de la gran burguesía y de los grandes monopolios.

¿Enseñanza a través de la historia? 

1.- La conformación del Frente Único de la clase obrera del proletariado, en el momento oportuno, es una preparación para las batallas actuales en la lucha contra el capitalismo y el fascismo. 

2.- El Frente Único es promover la unidad sindical tanto en el plano nacional, como en el plano internacional. 

3.- El Frente Único señala el camino justo de la lucha contra los grandes monopolios. 

4.- Educa en la labor diaria y cotidiana, entre las masas obreras y trabajadoras, en la lucha concreta contra la burguesía y sus acólitos. 

5.- Permite la labor organizada entre las diferentes ramas de la producción, para las batallas actuales y las venideras. 

6.- Finalmente, el Frente Único de la clase obrera, es una escuela que enseña al proletariado que, ante las guerras imperialistas y fascistas, la opción firme son las revoluciones socialistas.

viernes, 13 de junio de 2025

EDITORIAL JUNIO 2025

Las crecientes protestas en EE.UU. contra las políticas xenófobas, racistas, autoritarias y violentas que la tendencia burguesa ultra reaccionaria encabezada por Donald Trump viene aplicando, así como los avances de la extrema derecha en la U.E. junto a los movimientos de oposición que existen en Francia y Alemania ante la militarización de la sociedad son expresión de su descomposición. Esos conflictos internos, más las provocaciones a Rusia y China, así como las agresiones de los sionistas a sus países vecinos, son expresiones de la crisis social y política que atraviesa el capitalismo, especialmente el bloque imperialista EE.UU - U.E. pero también el bloque Rusia - China. 

Además de esos fenómenos visibles es importante valorar la causa de todas esas situaciones en la crisis económica cíclica, parte de la más amplia crisis general del capitalismo, que avanza y amenaza con desbancar el modelo de opresión de la democracia burguesa, instaurado después de la Segunda Guerra Mundial.

Ante su declive económico las potencias imperialistas dirigidas por la burguesía financiera tratan de reanimar el ciclo económico para no llegar a la depresión y para eso recurren a la guerra, mecanismo que como ya hemos dicho en otros escritos, garantiza la activación del aparato industrial en el corto y mediano plazo: Primero, aumentando el gasto militar y reorganizando el aparato industrial para la producción de armas y logística de guerra, después, financiando y ejecutando la reconstrucción de las fuerzas productivas destruidas. Ese método, para tratar de salir de la crisis capitalista, es bien conocido, porque fue aplicado en el pasado y será aplicado cada vez que el modo de producción capitalista esté en riesgo grave.

Las acciones económicas para tratar de superar la crisis se acompañan de un programa político que es típicamente fascista, expresión de la revancha de la burguesía contra el proletariado. Ese intento de sometimiento total del proletariado hasta la eliminación de todos sus derechos, tratando llevarlo casi a la esclavitud y la explotación extrema, es el proceso de fascistización, que de lograr instaurarse conduciría propiamente al fascismo.

Aquí podemos identificar una diferencia importante entre el proceso de fascistización que es el período de disminución de derechos, desaplicación de leyes, persecución y exclusión del proletariado de la vida social común de una sociedad, y el fascismo que es la expulsión total, represión directa, modificación de normas para legalizar la eliminación de derechos, el asesinato y opresión extrema del proletariado por parte de la fracción más reaccionaria del capital, que instaura para eso la dictadura extrema, abierta y legalizada, eliminando todas las formas y apariencias de la democracia burguesa.

La actual crisis capitalista no se desarrolla solo en EE.UU. o La U.E, se expande como una epidemia por todo el mundo y abarca países imperialistas o dependientes, pero ciertamente se expresa de formas diferentes.

UNA DIRECCIÓN REVOLUCIONARIA, PARA COMBATIR AL IMPERIALISMO Y AL FASCISMO

Por: S. Montes.

Parte de la tarea concreta necesaria e imprescindible que se debe realizar en estos momentos complejos y definitivos, en la lucha real contra el imperialismo y el fascismo, es fortalecer en el decir y en el hacer, la dirección revolucionaria y clasista.

Esta dirección, debe orientar las luchas del proletariado urbano y rural. Una verdadera dirección revolucionaria, comunista, marxista, leninista, que ante los distintos escenarios que el imperialismo, el fascismo, y sus cipayos desarrollen en cada país, esa dirección del Partido marxista leninista, en vinculación con las amplias masas, esté en capacidad de conducir las luchas políticas, económicas y sociales, por el camino revolucionario y comunista.

Una dirección que día a día continúe fortaleciendo los siguientes aspectos: 

1. Mayor dedicación, trabajo, desprendimiento, contundencia, organización, compromiso y responsabilidad con las bregas que hoy día exigen las luchas, obreras, campesinas y los pueblos rebeldes del mundo.

2. Luchar decididamente contra el oportunismo, el revisionismo y el reformismo.

3. Profundizar en cada espacio de lucha, los avances o procesos revolucionarios.

4. Mayor acción en las luchas, para mejorar las condiciones de vida de los explotados y oprimidos por el capitalismo.

5. Seguimiento y control de forma oportuna de todas, sus estructuras organizativas.

 6. Consolidar la vinculación entre las masas obreras, campesinas, en los territorios, y entre los distintos frentes populares.

Esto con el propósito de construir el Frente Antifascista, Antiimperialista en nuestro país, y a nivel Internacional.                                                 

Combativos Camaradas, tú tarea, es nuestra tarea: Trabajar, Fortalecer y Consolidar una Dirección Revolucionaria, Clasista, Marxista-Leninista, como GARANTÍA de VICTORIA, contra el fascismo y el imperialismo.

 

LENIN Y LAS MASAS POPULARES

Por: Jaramillo.
Lenin dedicó esfuerzo y atención a la filosofía en general y a la dialéctica marxista antes y durante la Primera Guerra Mundial, dado que, en ese contexto, todas las contradicciones del capitalismo se agudizaban de manera creciente, y maduraban las condiciones de una crisis revolucionaria. 

Su absoluto dominio del marxismo, le confirmo que la dialéctica materialista, y un seguimiento minucioso de los acontecimientos políticos y económicos proporcionaban la herramienta para hacer un análisis científico de las contradicciones de la etapa del capitalismo en la que se encontraba la sociedad; esto es, para estudiar las tendencias imperialistas imperantes, para revelar el carácter imperialista de la guerra.

Lenin y los bolcheviques siempre leyeron el momento político y participaron en las Dumas “democráticas” que el Zarismo ofrecía demagógicamente para aplacar la lucha popular y la rebeldía del pueblo, en situaciones muy difíciles, y de reflujo del movimiento de masas; así como en cualquier otra forma de luchas, no limitando las formas de lucha que hiciera avanzar la organización y la conciencia de clase del proletariado: Participaron en las Dumas, cuando la debilidad organizativa y el estado de ánimo de las masas así lo exigía hacerlo, (en situaciones de reflujo del movimiento de masas) y aprovecharon todos los resquicios, por mínimos que fueran, que el estado zarista, se veía obligado a ceder por las circunstancias de la lucha de clases; boicotearon la Duma, cuando el proletariado era organizativa y políticamente fuerte y el movimiento de masas estaba en ascenso, Lenin dedico tiempo para fortalecer el destacamento de la clase obrera y mantenía siempre una lucha ideológica férrea contra los elementos oportunistas, por su parte los bolcheviques se dedicaron a ganar hombres y mujeres a la lucha revolucionaria y la construcción partidaria como instrumento de la revolución, ya que la revolución la hacen las grandes masas siempre y cuando cuenten con una dirección revolucionaria, Lenin y los bolcheviques fueron expertos en leer el ánimo de las masas y definir la táctica adecuada.

Pero Lenin consideraba de manera categórica que: “la acción de las masas, por ejemplo, una huelga es siempre más importante que la acción parlamentaria, y no solo durante la revolución o en una situación revolucionaria”. Lenin, la enfermedad infantil…

domingo, 8 de junio de 2025

RESOLUCIÓN POLÍTICA DEL XX PLENO DEL COMITÉ CENTRAL DEL PCMLV, Mayo 2025

El marxismo-leninismo nos orienta a revisar, a analizar la realidad concreta en sus manifestaciones económicas, políticas y sociales. En la época del imperialismo, es importante tener en cuenta el particular desarrollo de las contradicciones fundamentales, cuyo comportamiento va a determinar niveles de afecciones e impactos en el seno de las mayorías explotadas y oprimidas. 

El mundo vive momentos determinantes, las contradicciones interiimperialistas se están manifestando hoy con particular intensidad y velocidad, lo que hace muy complejo el ejercicio del análisis de los fenómenos de la realidad. La lucha de clases se profundiza en el marco de la crisis general del capitalismo y con ella se multiplican las contradicciones entre la burguesía y el proletariado. 

La guerra expresa la lucha de las potencias imperialista por reacomodarse, es la expresión de un proceso de reorganización del capital llevado a cabo a sangre y fuego, los grupos imperialistas  expresados en bloques, cuentan con un gran poder económico, político y militar a nivel  mundial, esto ha generado repercusiones en todos los sectores de la sociedad, lo que a su vez se convierte en catalizador del resurgimiento de las expresiones más violentas y reaccionarias del imperialismo, por un lado, y por otro, genera  movilizaciones de parte de los pueblos en general y del proletariado en particular como expresión de la lucha para defender sus intereses y condiciones de vida. 

Ante el desarrollo del escenario de exacerbación de las contradicciones de clase, el partido del proletariado debe tomar muy en cuenta las orientaciones de Lenin, particularmente aquellas que nos orientan estudiar científicamente el  comportamiento de los fenómenos económicos y políticos que se desarrollan en el marco del imperialismo, para construir realizar las conclusiones que exige la realidad concreta desde el punto de vista de los intereses del proletariado. 

Lenin nos invita a esforzarnos porque las consignas tácticas tengan justeza y sean sostenidas por la fuerza combativa, real, de las masas.  Para que esto suceda, es necesario determinar con precisión cuál es el estado de ánimo de las masas, y cuál es la forma de atenderlas y orientarlas. He aquí un reto gigantesco que se nos presentan en los momentos actuales donde en buena parte la atención de las masas está atraída por las propuestas de los elementos más reaccionarios del capital, y, por otro lado, las confusiones sobre cuál es el enemigo y amenaza principal, genera como consecuencia mayor dispersión a lado de las organizaciones revolucionarias.

Los voceros imperialistas aprovechan el momento para imponer su agenda, abrazan abiertamente la propuesta fascista, restringen libertades y de manera directa hablan de confrontar con gran determinación a sus rivales, expresan sus intenciones de llevar sus acciones hasta las “últimas” consecuencias, cada cual a su manera expresa la “seguridad” de que saldrá bien librado y que su enemigo directo sucumbirá sin remedio alguno. Pero más allá de estas argucias propagandísticas, la realidad va acumulando una serie de consecuencias que amenaza con producir cambios en el marco de un reacomodo imperialista. 

Aquí nuevamente debemos recordar las orientaciones de Lenin, en su obra el Imperialismo fase superior del capitalismo advertía al proletariado y los pueblos sobre el fenómeno de la descomposición del imperialismo, del movimiento que sus agentes provocaban en búsqueda de concretar su dominio sobre las diversas esferas de la vida de millones de trabajadores.

Encontrar el carácter de clase de las guerras y sus manifestaciones en la actualidad nos dará a su vez orientación sobre hacia dónde dirigir nuestro mayor esfuerzo en la acción política que vamos a desarrollar.

domingo, 1 de junio de 2025

DESCOMPOSICIÓN IMPERIALISTA Y FASCISTIZACIÓN, UNA REALIDAD A ENFRENTAR

(Articulo de la Revista Unidad y Lucha N°50, mayo 2025)

El proletariado internacional debe observar con mucha atención la realidad y no dejarse confundir por los virajes en la política de la oligarquía financiera, acelerados ahora desde EE.UU. por la administración Trump y sus serviles.

Con un programa de arbitrariedades y alejamiento de las viejas prácticas burocráticas, la dirección política burguesa de extrema derecha, va tomando el control de algunos gobiernos y expresando sin ambages su faz reaccionaria, violentando leyes y poniendo en entredicho incluso su propia Constitución Política, tratados internacionales o derechos humanos, considerados hipócritamente inviolables hasta hace un tiempo.

Claramente podemos darnos cuenta que se viene produciendo un cambio acelerado en las formas del sistema explotador, que no afectan su contenido (de clase), más bien depuran la esencia capitalista - imperialista del Estado burgués en vías hacia su expresión de clase más extrema.

Independientemente de la forma que adopte en cada coyuntura y en cada país, que ciertamente debe ser tomada en cuenta, el imperialismo, como fase superior del capitalismo está obligado a aumentar su esencia explotadora, violenta y guerrerista, destinada a lograr la máxima expoliación del proletariado y los pueblos a nivel mundial, a aumentar la tasa de plusvalía, las ganancias de los supermillonarios a niveles inimaginables, llevando la diferencia entre los explotadores más ricos y la mayoría de los explotados a términos extremos para satisfacer los requerimientos del capital.

En sus crisis más profundas, como ahora, el imperialismo recurre a la represión interna y a la agresión militar externa. Lo hicieron antes, lo hacen hoy y lo harán mañana, mientras exista el capitalismo, en un intento por lograr el sueño de control total de la sociedad y a la vez reanimar el ciclo económico del capital, ya en la puertas de pasar a la recesión y después seguramente a una gran depresión. Surge entonces, como respuesta propia de los modos de producción en declive, en descomposición, la dictadura terrorista de la clase dominante, como ocurrió con los antiguos imperios, y como está ocurriendo también con el imperialismo.

En la fase superior del capitalismo esa dictadura de clase adquiere una forma particular y extrema: el fascismo, el cual no aparece un día de la nada, sino que es el resultado del proceso de descomposición del imperialismo, con la normalización gradual de la revancha burguesa violenta y cotidiana contra el proletariado, expresada en la super explotación, eliminación de derechos, persecución de los trabajadores, asumidos ya abiertamente como enemigos, con expresiones en la xenofobia y racismo, expulsión y sanción extrema contra los migrantes, los "invasores" o "terroristas", sin fórmula de juicio, buscando el control arbitrario de todas las instancias de poder directamente por los amos del 1% del capital.

La extrema derecha aplica todo tipo de deformaciones antidemocráticas dentro de la sociedad ante el miedo a la "invasión" de los explotados, demostrando su terror y preparándose ante las naturales e inevitables acciones de respuesta, tanto pacífica como violentas de los oprimido y su salto progresivo a la vía revolucionaria.

La ofensiva arancelaria, y de la "diplomacia" de las imposiciones, lanzada por Trump en su sueño reaccionario de retomar la antigua pujanza industrial estadounidense y terminar de concentrar todo el control económico, político, militar en las manos de los supermillonarios estadounidenses lo lleva a acelerar la confrontación y a provocar una descomposición más aguda del sistema capitalista - imperialista mundial, que tendrá consecuencias negativas muy profundas principalmente para los trabajadores, pero también para la pequeña burguesía y algunas fracciones de la gran burguesía en declive, empujando a las otras potencias imperialistas, los países dependientes y las masas populares a la lucha en un corto plazo, intensificando las contradicciones fundamentales del imperialismo de forma exponencial, abriendo las puertas a guerras y revoluciones, producto de las desmejoras en las condiciones de vida del proletariado, y como consecuencia directa de éstas, una situación de lucha generalizada.

jueves, 15 de mayo de 2025

EDITORIAL MAYO 2025

Los sucesos violentos que estremecen el mundo como en Ucrania, Siria, India, Turquía, Burkina Faso, entre otros, nos permiten ratificar que vivimos un tiempo de agudización acelerada de las contradicciones imperialistas, las que debemos identificar y abordar científicamente. 

El paso de crónicas contradicciones fronterizas, étnicas o de clase a su agudización con enfrentamientos abiertos, el agravamiento diario de los conflictos, la presencia constante de masacres, el genocidio impune, la represión extrema o la violación flagrante y descarada de la legislación nacional o internacional son otros hechos, que junto a la amenaza de uso de armas nucleares, reflejan en la práctica esa agudización de las contradicciones propia de la fase imperialista del capitalismo, cuando se enfrenta a una crisis profunda y la burguesía busca métodos extraordinarios para tratar de resolverla. 

Hechos que junto a la persecución cotidiana contra el proletariado y la fascistizacion en los países "en calma", son acontecimientos que los marxista leninistas hemos anunciado de manera reiterada y consecuente, no por tener una bola de cristal, sino como conclusión de nuestras investigaciones con la aplicación del método materialista dialéctico que permiten reconocer el avance de la política reaccionaria contra el proletariado a nivel global.

Otro evento de significado es que la conmemoración de los 80 años de la derrota del fascismo tenga un acto central en Rusia, y que además también haya otros actos, casi insignificantes, en Francia, Alemania y otros países, puede servir de referencia para valorar la forma como se van asumiendo los aglutinamientos entre las potencias imperialistas y cómo van abordando sus contradicciones.

El bloque China y Rusia se concentra estas fechas en Moscú, y a pesar de las desquiciadas amenazas del payaso Zelensky, el gobierno de Putin logra aglutinar decenas de jefes de Estado y de gobierno para recordar con gran orgullo aquella heroica epopeya del ejército rojo y el pueblo de la Unión Soviética, es bueno aclarar: no sólo ruso, contra las hordas nazi-fascistas que amenazaban con destruir la URSS y someter la humanidad.

SITUACIÓN DE LA CLASE OBRERA Y SUS DESAFÍOS

Por: J. Blanco
En el marco de la confrontación de los grandes bloques imperialistas EEUU – Unión Europea y China-Rusia y de la crisis general del capitalismo, la situación de la clase obrera como fuerza de trabajo es cada vez más precaria, siendo que el acelerado abaratamiento de la mano de obra condiciona a las inmensas mayorías explotadas y oprimidas de la sociedad a vivir en situación de extrema pobreza, cuando sus ingresos no permiten ni siquiera reponer sus propias energías para seguir siendo explotado por el sistema capitalista. Las condiciones de explotación de la fuerza de trabajo, que generan inmensas ganancias para los capitalistas burgueses como producto de la plusvalía que extraen a la clase obrera, son cada vez más inhumanas y degradantes, favorecidas a su vez estas condiciones de explotación capitalista por:

a) Los movimientos migratorios del proletariado en el mundo, que coloca a la fuerza de trabajo en condiciones de “ilegalidad burguesa”, tributo aprovechado al máximo por los explotadores para imponer salarios, condiciones trabajo y condiciones de vida sin ningún tipo de reclamo ni de exigencia por los explotados. 

b) El auge del fascismo y de gobiernos de derecha y ultraderecha que imponen políticas neoliberales de desregulación de los derechos laborales, eliminación de convenciones colectivas de trabajo y de las organizaciones sindicales, desprotección social, precariedad de las condiciones de trabajo y bajos salarios. 

c) Bajo perfil de lucha del movimiento sindical, tanto en el plano reivindicativo, como en el plano político e ideológico. 

LA CUALIFICACIÓN EN EL FUNCIONAMIENTO DEL PARTIDO

Por: Prieto.
El funcionamiento óptimo de los organismos internos del partido, así como sus organismos de masas que son sus correas de transmisión debe ser una constante preocupación para una militancia que entiende lo fundamental que es para un partido revolucionario, la vitalidad de estos organismos en consonancia con los objetivos planteados. Particularmente para los diferentes organismos de dirección el hecho de lograr la concatenación dialéctica del funcionamiento interno al tiempo que se desarrollan los organismos de masas como espacios capaces de atraer y mantener la atención de buena parte de estas, cosa que es fundamental para poder orientar su accionar de manera efectiva y eficaz con perspectiva revolucionaria es tarea de primer orden.

Lenin como uno de los grandes maestros del proletariado nos dejaron un gran legado conformado por numerosas e importantes obras en la que demuestra con magistral sencillez como la labor de organización y funcionamiento del partido constituye una importante columna sobre la que se apoya la posibilidad de las futuras victorias del proletariado contra su enemigo principal, el capitalismo en su fase imperialista.

En este sentido resalta Lenin la categoría de revolucionario profesional, como una cualidad a ser alcanzada en el seno del partido proletario y cualificada en la labor de que este dispone para cada uno de sus cuadros.

En su obra ¿Qué Hacer? Lenin habla sobre la necesidad de que el partido proletario supere los métodos artesanales de lucha. Aquí es preciso recordar lo que menciona Lenin en el aparatado donde hace una diferenciación entre la organización de los obreros y la organización de los revolucionarios. Lenin afirma: ... La organización de los revolucionarios, debe agrupar, ante todo, a personas cuya profesión sea la actividad revolucionaria".

Esto nos lleva obligatoriamente a una pregunta: ¿Qué significa ser un revolucionario profesional? Debemos respondernos sin muchas vacilaciones que un revolucionario profesional es aquel militante, hombre o mujer, niño, joven o adulto que tiene como primera prioridad en su vida el llevar a cabos las tareas de diversas índoles que ha orientado el partido en el marco de los objetivos trazados por el partido en cumplimiento de su papel de destacamento de vanguardia.

Esta labor requiere ser asumida con disciplina consciente, no solo de palabra, sino en el calor de la práctica diaria. Un revolucionario profesional constantemente piensa y actúa conforme a los requerimientos del movimiento revolucionario que impulsa el proletariado. Un revolucionario profesional, piensa día y actúa constantemente en favor de lograr los objetivos trazados por el partido. Su cerebro y sus fuerzas están básicamente en disposición permanente para la labor revolucionaria que orienta el partido

Para un revolucionario profesional, la tarea revolucionaria está en un primer orden de prioridad; entiende que de las acciones que va a desarrollar en favor de la causa revolucionaria va a depender la vitalidad, la fortaleza particular del Partido. Pensar en la revolución permanentemente, ver la forma de aplicar de la manera más efectiva la tarea revolucionaria en las diferentes áreas y diferentes sectores donde se puede desarrollar, tal es la tarea de un revolucionario profesional.

En este sentido asimismo a la medida que el partido nos va cualificando como un revolucionario profesional debemos asumir la importancia de la especialización en el partido, fenómeno que comporta la necesidad de atender de manera dedicada cada responsabilidad que el partido nos designe, buscando lograr la mayor efectividad y eficacia posible, combinando el ímpetu y sentido práctico revolucionario en el terreno de lo concreto.

Pero siguiendo en la senda de las orientaciones del marxismo leninismo esta labor debe ser asumida con fortaleza en la praxis revolucionaria, esto implica estudiar de manera científica los elementos componentes que exige llevar a cabo una responsabilidad que nos haya confiado el partido, buscando siempre la mayor eficacia y efectividad en la tarea encomendada. La especialización nos invita a superar las formas artesanales de organización y sustituirlas por la comprensión y abordaje científico de nuestra labor. Por ejemplo, un propagandista marxista leninista no sólo necesita hacer panfletos, periódicos o revistas donde se exponga nuestra política a las amplias masas y en particular al proletariado este además debe ser un estudioso de la propaganda, los métodos científicos de abordarla, de llegar a las masas; de perseguirlas y convencerlas de la justeza y viabilidad de nuestros planteamientos, buscando siempre alcanzar la comprensión más completa, exacta de parte de quienes tienen contacto por diferentes vías de nuestra propuesta.

Un dirigente marxista leninista debe ser un estudioso de la realidad económica y política del país, como es el comportamiento de la distribución, del consumo, la población que interviene en la producción, como es el comportamiento de las clases sociales, su influencia en las diferentes ramas de la producción, entre otros elementos por ejemplos. Al mismo tiempo, debe ser un estudioso de la realidad internacional, identificando en ella los eslabones que la concatenan con nuestra realidad y así identificar también las formas y vías de desarrollar las respuestas ante una determinada realidad. Esto requiere organismos en funcionamiento óptimo, activos, trabajando en torno a su realidad concreta, pero con la capacidad de elevarse más allá de las circunstancias inmediatas y ver los puntos del horizonte de la lucha que el común no ve, ahí está parte de la labor de la vanguardia.

Ahora bien, insistimos en que esto tiene que funcionar, a un ritmo adecuado con las exigencias de la realidad. Un partido cuyos organismos centrales vayan retrasados con respecto al curso de los acontecimientos económicos y políticos que marcan la vida del proletariado, quedará relegado de una dirección pertinente de las masas y de sus propios militantes.

La realidad actual, con sus fenómenos acelerados, impactante y determinantes, nos ha puesto al frente la necesidad de cualificar y aprovechar de la mejor manera nuestro tiempo, No se trata solo de cuánto tiempo nos reunimos, sino qué tanto avanzamos, si el contenido de nuestras conclusiones alcanzadas al final de cada encuentro orgánico va dejando resultados que nos permiten identificar algunos avances y el carácter de los mismos.

Estudiar estos elementos aplicando la herramienta marxista leninista nos permite alcanzar una alta comprensión sobre el contexto que nos ha tocado vivir y que queremos transformar, detectando con precisión militante cuales son los elementos que deben defenderse en favor de la causa proletaria. Pero he aquí uno de los elementos a superar con urgencia, la falta de una mayor y mejor dedicación desde el punto de vista orgánico a la investigación de los fenómenos, lo cual no debe ser visto como mero ejercicio intelectual, sino como parte de la ofensiva que debemos desarrollar en el plano de la lucha ideológica, en un momento donde el diversionismo ideológico, el revisionismo y el reformismo pululan proletariado. corrompiendo parte del espíritu de lucha revolucionaria del Partido.

Ninguna tarea es demasiado pequeña como para hacerla a un lado, toda responsabilidad asignada es una pieza del rompecabeza orgánico del partido, es un instrumento que debe ser tocado de manera armoniosa según la necesidad de la orquesta, está a su vez está dirigida bajo los preceptos del centralismo democrático lo que hace posible alcanzar los objetivos previstos en favor de seguir avanzando en la lucha por la revolución proletaria.

martes, 29 de abril de 2025

LAS CONTRADICCIONES INTERIMPERIALISTAS, SE EXACERBAN EN EL MARCO DEL REACOMODO IMPERIALISTA

Por: E. Prieto.
Donald Trump anunció con bombos y platillos la aplicación de una serie de medidas arancelarias, cuyo objetivo es poder hacer frente al ascenso sostenido de China en el marco del escenario económico internacional. Este ascenso de China, pone en peligro la hegemonía de los EEUU y afecta a sus golpeados socios de la UE en la actividad económica a nivel mundial.

Es decir, China se orienta en acelerar el desplazamiento de los EEUU del puesto de principal actor comercial a nivel mundial y con esto amenaza también con seguir dando importantes pasos en la disputa que tiene por desplazarlo de los primeros puestos en el dominio político internacional.

Es esta una expresión del reacomodo imperialista en la actualidad. Lo vemos con particular claridad en una lucha abierta en diferentes escenarios donde se dirimirán las contradicciones inter Imperialistas por el reparto del mundo.

Ambos contendientes son expresión de un determinado bloque Imperialista, desde ahí apoya sus acciones con la que pretende concretar ventajas tácticas y estratégicas en los diferentes campos de batalla que están librando y que han de librar en función de asegurarse para sí los mejores resultados en sus objetivos de dominio del mundo.

En este sentido, la llamada guerra arancelaria es una confrontación por el reparto del mundo, las contradicciones a dirimir entre los imperialistas muestran las formas de las rutas de acción que se propone el capitalismo hoy para repartirse el mundo.

En lo ideológico este hecho provoca una serie de comportamientos que en el marco de la lucha ideológica son tomados por los llamados tanques pensantes del capitalismo para confundir y dispersar a los trabajadores y los pueblos, distraerlos y ocuparlos en situaciones que nada tienen que ver con la lucha por los objetivos estratégicos y tácticos que debemos librar en la lucha por nuestros intereses de clase.

Los efectos de la guerra arancelaria sobre la actividad económica, son catalizadores de una serie de fenómenos en lo económico político que se van orientando a un cambio de forma en las manifestaciones del capital financiero, pero no de su contenido, que se mantiene en su objetivo central de obtener la máxima ganancia.

miércoles, 16 de abril de 2025

A 108 AÑOS DE LAS FAMOSAS TESIS DE ABRIL ESCRITAS POR V.I LENIN

El 7 de abril de 1917, fue publicado el artículo "Las Tareas del Proletariado en la Presente Revolución" en el Núm. 26 de Pravda con la firma de Lenin.

Este artículo contiene las famosas TESIS DE ABRIL de V.I Lenin, que escribió, por lo visto, en el tren la víspera de su llegada a Petrogrado.

Lenin leyó las tesis en dos reuniones, una de Bolcheviques y otra conjunta de delegados Bolcheviques y Mencheviques a la Conferencia de toda Rusia de los Soviets de Diputados Obreros y Soldados celebradas el 4 (17) de abril de 1917 en el palacio de táurida.

"Habiendo llegado a Petrogrado únicamente el 3 de abril por la noche, es natural que sólo en nombre propio y con las siguientes reservas, debidas a mi insuficiente preparación, pude pronunciar en la asamblea del 4 (17) de abril un informe acerca de Las Tareas del Proletariado Revolucionario."

"Lo único que podía hacer para facilitarme la labor (y facilitarsela también a los contradictores de buena fé) era preparar unas TESIS por escrito, las leí y entregué el texto al camarada Tsereteli. Las leí muy despacio y por dos veces: primero en la reunión de los Bolcheviques y después en la de los Bolcheviques y Mencheviques."

"Publico estas tesis personales mías, acompañadas únicamente de brevísimas notas explicativas, que en mi informe fueron desarrolladas con mucha mayor amplitud"

TESIS

1) En nuestra actitud ante la guerra, que por parte de Rusia sigue siendo indiscutiblemente una guerra imperialista, de rapiña, también bajo el nuevo gobierno de Lvov y Cía., en virtud del carácter capitalista de este gobierno, es intolerable la más pequeña concesión al “defensismo revolucionario”.

El proletariado consciente sólo puede dar su asentimiento a una guerra revolucionaria, que justifique verdaderamente el defensismo revolucionario, bajo las siguientes condiciones: a) paso del poder a manos del proletariado y de los sectores pobres del campesinado a él adheridos; b) renuncia de hecho, y no de palabra, a todas las anexiones; c) completo rompimiento de hecho con todos los intereses del capital.

Dada la indudable buena fe de grandes sectores de defensistas revolucionarios de filas, que admiten la guerra sólo como una necesidad y no para fines de conquista, y dado su engaño por la burguesía, es preciso aclararles su error de un modo singularmente minucioso, paciente y perseverante; explicarles la ligazón indisoluble del capital con la guerra imperialista y demostrarles que sin derrocar el capital es imposible poner fin a la guerra con una paz verdaderamente democrática y no impuesta por la violencia.

Organizar la propaganda más amplia de este punto de vista en el ejército de operaciones. Confraternización en el frente...

domingo, 13 de abril de 2025

EDITORIAL ABRIL 2025

Queda totalmente claro, para quienes quieran analizar desde la óptica científica del materialismo dialéctico la realidad de la lucha interimperialista por el control de la economía mundial, que el enfrentamiento se lleva a cabo entre los EE.UU. y sus secuaces de la U.E. contra el bloque dirigido por China aliada a Rusia, donde el primer bloque trata de hacer maniobras para preservar la hegemonía económica, política y militar, a pesar de sus debilidades y diferencias, dirigidos por una fracción de la oligarquía financiera estadounidense que no quiere compartir sus ganancias, mientras el segundo bloque aprovecha las fracturas y debilidades de sus contrincantes para avanzar, mientras abordan sus propias contradicciones internas. 

La fracción de burguesía financiera dirigida por Trump ha asumido como método para tratar de recomponer su economía en crisis la guerra arancelaria, que es un mecanismo más del arsenal de los imperialistas para obstaculizar el ingreso de mercancías de sus oponentes a su mercado nacional y obtener más ingresos, mientras por otros métodos, incluyendo el chantaje político, el bloqueo económico y la amenaza militar tratan de tomar la ofensiva para debilitar al contrincante en su propio territorio, métodos que ya fueron denunciados por el propio Marx al escribir sobre los nefastos mecanismos del capitalismo para combatir a las potencias enemigas y al proletariado. 

Esos enfrentamientos forman parte de la dinámica natural del capitalismo/imperialismo cuando llega a agudas crisis y requiere dar una nueva forma a su economía ya agotada, a pesar de que en la esencia sigue profundizando explotación y obtención de máxima ganancia por medio de la opresión salvaje del proletariado. 

Las consecuencias de esos choques no se sentirán solo en las grandes potencias imperialistas involucradas en la pugna directamente, sino que además van a irradiar su oleada destructiva de fuerzas productivas a todos los rincones donde el capitalismo sea el modo de producción dominante, por lo que es de esperar una crisis, recesión y después depresión mundial con su natural consecuencia de guerras y revoluciones de liberación nacional en primer momento y socialistas en una segunda fase, ante lo cual el imperialismo y sus jefes capitalistas se van preparando promoviendo la fascistización como arma ideológica y material para tratar de asumir el control político, económico y militar de una sociedad atemorizada por la inminencia de una guerra.

La contradicción imperialista puede avanzar a un choque directo, pero también a un proceso de reparto de la economía por zonas de influencia entre los bloques imperialistas y potencias en pugna. 

A FORTALECER EL PARTIDO M-L, EN LA LUCHA CONTRA EL FASCISMO

Por: J. Jaramillo.

Uno de los elementos fundamentales para combatir al fascismo es el fortalecimiento del destacamento de la clase obrera como instrumento y herramienta para la lucha por la democracia popular, liberación nacional y el socialismo. Esta fue una de las orientaciones de Dimitrov. 

Dimitrov indica que la victoria del fascismo depende ante todo de la actitud combativa de la propia clase obrera, de la cohesión de sus fuerzas en un ejército combatiente que luche unido contra la ofensiva del capital y del fascismo. El proletariado, al establecer su unidad de lucha, paralizaría la influencia del fascismo sobre los campesinos, sobre la pequeña burguesía urbana, sobre la juventud y los intelectuales, conseguiría neutralizar a una parte y hacer pasar a su lado a la otra, por esa razón una de las tareas primordial es difundir nuestras propuestas en las masas obreras y campesinas orientarla hacia el camino revolucionario sacarla de la confusión ideológica que está en la actualidad, ya que están los programas de la burguesía reaccionaria, la burguesía emergente y pequeña burguesía y nuestro programa, se debe hacer los esfuerzos para atraer a los sectores patriótico más avanzados hacia el peligro del fascismo.

Otro aspecto importante es un fuerte partido revolucionario que sepa dirigir acertadamente la lucha de los trabajadores contra el fascismo que acecha a nuestro país por la política errática que permite a la derecha ganar espacio.

También debe existir una justa política de la clase obrera respecto al campesinado y a las masas pequeño burguesas de la ciudad, para que puedan elevar políticamente a un grado superior de conciencia y de actividad revolucionaria, superar sus vacilaciones propias por su carácter de clase ante esto es necesario su incorporación en el frente popular.

LA DISCIPLINA CONSCIENTE Y LA LUCHA CONTRA LA INACCIÓN

Por: E. Beltrán.

En el complejo momento político que atraviesa la clase obrera y los pueblos, es necesario que cada militante de nuestra organización asuma con mayor seriedad las responsabilidades que nos competen. La lucha de los trabajadores no permite distracciones ni excesos de flexibilización en nuestros métodos de trabajo. En este sentido, la disciplina consciente como objetivo, se requiere como una necesidad para avanzar en nuestras tareas y consolidar la organización.

El capitalismo, con sus estructuras de dominación ideológica, busca permanentemente terminar con nuestras capacidades de organización y acciones. Un Enemigo Interno es la inacción que no debe ser subestimada. Cuando nos permitimos ser llevados por la apatía, estamos de hecho colaborando con el sistema que estamos combatiendo. Las distracciones y el relajamiento en el cumplimiento de nuestras responsabilidades son tácticas del enemigo que buscan debilitarnos. 

Debemos ser autocríticos y preguntarnos constantemente: ¿Estoy realmente cumpliendo con mis responsabilidades? ¿Estoy aportando al avance de la causa? Con las respuestas sinceras, dependerá la toma de nuevas decisiones que marquen los siguientes pasos para obtener una organización mayor consolidada y cualificada.

La extrema flexibilización en el tratamiento de las tareas asignadas, nos llevan al descuido y al desinterés. En lugar de adaptarnos a las circunstancias, debemos mantenernos firmes en nuestras convicciones y en nuestras metas. La lucha revolucionaria siempre ha requerido del máximo compromiso y dedicación, lo que significa que no podemos permitir que la falta de urgencia o lentitud nos desvíen de nuestro camino.

PUEBLOS EN LUCHA

Por: S. Montes.

Definitivamente, los pueblos en resistencia y lucha, están cada día mostrando que no están dispuestos a retroceder, en las conquistas que han obtenido a lo largo de la historia de la lucha de clases.

SÍ, LA LUCHA DE CLASES.

Porque si algo, ha entendido el proletariado de la ciudad y el campo en su proceso de organización, educación teórica y práctica, y en las acciones, es a defender sus derechos políticos, sociales y económicos, a través de las batallas frontales y directas contra la burguesía, el imperialismo y el fascismo, sin titubeos, con firmeza y temple de acero.

Es así, como la clase obrera, los trabajadores y el campesinado pobre y medio organizado, en su destacamento de vanguardia; el Partido ML, va abriendo y preparando los caminos para que los pueblos explotados y oprimidos por el capitalismo, estos pueblos, tengan las mejores condiciones para las batallas que se están dando y para las nuevas batallas que están por venir. 

¿POR QUÉ? 

Porque las luchas de los pueblos son la lucha de los explotados contra los explotadores, es la lucha del obrero contra el patrón, es la lucha del campesino pobre contra el terrateniente, es la lucha de las poblaciones contra todo el sistema capitalista.

domingo, 9 de marzo de 2025

EDITORIAL MARZO 2025

Las diferencias entre grupos capitalistas nacionales y las luchas entre ellos no pueden confundirnos sobre las contradicciones fundamentales, ya que estas diferencias entre grandes burgueses son a lo sumo contradicciones secundarias, entre grupos capitalistas, que no afectan la estructura de poder y explotación imperialista e incluso el objetivo de esta pugna es más bien consolidar su poder y unificar las diferentes tendencias internas convenciéndolas o sometiéndolas.

Como sabemos, en la contradicción interimperialista se enfrentan hoy dos bloques (EE.UU. - U.E./ China - Rusia). Estos dos bloques están tratando de consolidarse a lo interno y dividir a su contrario.

Mientras Trump trata a Canadá, la U.E y especialmente a Zelensky como unos payasos (que de hecho lo son) y trata de hacerlos que se sometan totalmente a su control y protección, haciendo ver que Putin es su "amigo" para crear miedo en Europa, desconfianza en China y meter cizaña en ese bloque para seguir "fijando" y neutralizando a Rusia, por su parte Rusia trata de ser una cuña entre EE.UU. y la U.E. utilizando para eso a Ucrania como punto de discordia.

En estas maniobras, Rusia y EE.UU. están jugando un papel central y están demostrando su poder, principalmente político y militar, presionando para mejorar su posición y dividir al opuesto, ahí está el centro de la actual política de la oligarquía financiera de EE.UU y de Rusia: Mientras Trump plantea apropiarse de las tierras raras de Ucrania, colocar allí sus tropas y empresas para frenar a Rusia de manera directa, Rusia juega a crear división entre EE.UU. y los países de Europa a los que exigen se deben someter a la dirección de los EE.UU. de forma directa y sin objeciones, lo que puede consolidar el bloque a mediano plazo, pero subordinados totalmente al gobierno de EE.UU., lo que significa una ampliación significativa del poder de ese bloque, ya que al actuar totalmente coordinados serían un puño moviéndose firme en una sola dirección, y esa dirección sería someter al otro bloque dónde China es el enemigo económica y Rusia el militar, juntos serán pronto la primera fuerza mundial, si se separan la oligarquía de EE.UU. mantendrá su hegemonía.

En el marco de estas complejas y para algunas inexplicables jugadas, en medio de una terrible confusión de las masas populares; acrecentada por las redes sociales y las manipulaciones del poder, aunado a la debilidad de la izquierda revolucionaria, que en algunos países no existe y en otros está penetrada por el oportunismo, la oligarquía financiera va avanzando en su proyecto ideológico. Cómo sabemos las ideas dominantes en una época son las ideas de la clase dominante y la oligarquía financiera internacional está trabajando fuerte por consolidar sus ideas, que sin duda alguna, en medio de una revancha contra la clase obrera, las ideas más apropiadas para ellos tratar de someter definitivamente a toda la sociedad son las ideas fascistas, de allí que el proceso de fascistización que vivimos no es más que la expresión en la superestructura de lo que está ocurriendo en la base material; el actual avance económico violento de la oligarquía financiera debe tener su expresión ideológica y es la fascistización.

TODAS UNIDAS CONTRA EL FASCISMO

Por: S. Montes.
8M Día Internacional de la Mujer Trabajadora.
 

Con la fuerza de la valentía, con la fuerza de la sangre derramada de miles de mujeres y hombres en las diferentes batallas contra el Fascismo, las trabajadoras, las obreras, campesinas, cultoras, pescadoras, todas las combatientes del globo terráqueo tienen la herencia histórica, de continuar activas junto a la clase proletaria y el campesinado a organizar, educar y accionar diferentes formas de lucha contra el Fascismo y el Imperialismo.

Fascismo que en la actualidad se presenta, de distintas formas y ropajes, presentando sus campos de concentración modernos, sus medios tecnológicos putrefactos y dañinos, tratando de manipular, confundir y desorientar a los explotados y oprimidos, de su lucha contra su enemigo de clase.

Pero la senda de las mujeres proletarias, de los Partidos y Organizaciones Comunistas Marxistas Leninistas, de los Pueblos aguerridos que han combatido a este monstruo monopólico y financiero del capitalismo, sabrán nuevamente aplastar y derrotar a los fascistoides y sus cómplices. 

La gran tarea hoy de los movimientos femeninos, proletarios, revolucionarios, antifascistas y antiimperialistas es seguir forjando y promoviendo espacios de encuentros para aglutinar y concretar un Frente Antifascista en cada país, y luego dar el salto al Frente Antifascista Internacional. Es una necesidad, un compromiso de vida y de humanidad, conformar el FAI (Frente Antifascista Internacional).

Es una labor que asumirán las trabajadoras, obreras y campesinas con su ímpetu, desprendimiento, responsabilidad, valentía, disciplina y temple revolucionario, para derrotar al Fascismo y transitar al porvenir socialista y comunista. 

¡Las Mujeres Trabajadoras, Obreras y Campesinas del Mundo están en primera fila contra el Fascismo! 

¡Viva el 8M Antifascista y Antiimperialista! 

¡Todas Unidas Contra el Fascismo!

LA LUCHA IDEOLÓGICA CONTRA EL OPORTUNISMO

Por: J. Jaramillo
Lenin tenía la capacidad de apreciar el estado de ánimo de las masas, de establecer cuáles eran las tareas prioritarias, qué argumentos, consignas y acciones eran necesarias para hacer avanzar la conciencia y la organización en cada momento, destacaron en Lenin muy por encima del resto de dirigentes revolucionarios. Pero estas cualidades se unieron a otras: una confianza inquebrantable en la capacidad creadora de los proletarios y, sobre todo, no vacilar a la hora de dar la batalla contra la influencia ideológica de clases ajenas que penetraban, tanto en el seno del Partido Bolchevique como en el movimiento en general, a través de las políticas oportunistas y “conciliadoras” de los partidos pequeñoburgueses, menchevique y social revolucionario o eserista [1]. Este enfoque sistemático educó a toda una generación de militantes obreros, estudiantes y campesinos que engrosaban las filas bolcheviques.

La lucha por clarificar el programa, la táctica y la estrategia de la revolución tuvo que acometerla enérgicamente en primer lugar dentro del Partido Bolchevique. 

Lenin fue defensor en la lucha contra el revisionismo y el reformismo, en sus variantes oportunismo de derecha y de izquierda, el oportunismo de derecha, es el servilismo ante la nueva burguesía disimulada bajo frases democráticas y sociales democráticas, con impotentes aspiraciones, suplantando la esencia revolucionaria con ideas reformistas que en el fondo repudia el marxismo y la lucha de clases, pero que todo se hace bajo la falsa consigna de defensa y desarrollo del marxismo, corriente que en el siglo XXI se hizo internacional, se difundió en todos los partidos socialistas y paso a ser la ideología oficial de la II internacional. Oportunismo de izquierda no propaga ideas reformistas, usa con furia frases revolucionarias sin preocuparse por los análisis científicos de la realidad económica y los análisis revolucionarios de la historia mundial con las fuerzas de clase, conserva un espíritu ultra revolucionario, aventurero, nada científico. 

Tanto el oportunismo de derecha como el de izquierda están carentes de firme organización y disciplina proletaria, producen un daño enorme a la causa revolucionaria y del socialismo, condenando a las bases a perder ante el capitalismo...

FASCISMO, DE CLARA ZETKIN (Agosto 1923)

La Camarada Comunista Clara Zetkin, además de aportar en la teoría y en la praxis, la defensa de los derechos de las Mujeres explotadas y oprimidas del mundo, y de proponer en la Segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenhague en los años 1910 un Día Internacional de las Mujeres, el cual fue aprobado. Pero fue en 1911 cuando se materializó el Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras. También lucho contra el Fascismo.

Y en este 8 de marzo, Combativo, nos gustaría compartir con ustedes, algunos extractos del escrito FASCISMO, agosto 1923, donde la Camarada Zetkin, realiza grandes aportes en la lucha contra el Fascismo. 

“En el Fascismo el proletariado ha encontrado un enemigo extraordinariamente peligroso. El fascismo es la expresión más directa de la ofensiva general emprendida por la burguesía mundial contra el proletariado. Su derrocamiento es, por tanto, una necesidad absoluta, o mejor incluso, es parte de la existencia cotidiana del pan de cada día de todo trabajador. Por estos motivos, todo el proletariado debe concentrarse en la lucha contra el fascismo”. 

“Será mucho más fácil derrotar al fascismo si estudiamos clara y definitivamente su naturaleza” ... 

“Tenemos que superar al fascismo no solo militarmente, sino también política e ideológicamente. Hasta hoy los reformistas consideran al fascismo solamente como una violencia cruda, una reacción contra la violencia iniciada por el proletariado”. 

“El fascismo tiene diferentes características en cada país”...

FRASES VACIAS DEL ENEMIGO

Por: S. Montes.

Si algo diferencia al método ML, la experiencia, compromiso, estilo de trabajo y a los maestros del proletariado Marx, Engels, Lenin y Stalin, es que siempre combinaron la teoría con la praxis revolucionaria, con la práctica comunista. 

Hoy se observa como el método OPORTUNISTA, utilizado por la burguesía tradicional y emergente, el terrateniente y la pequeña burguesía, colocan sus frases y discursos  vacíos, rimbombantes con matices y caricaturas de revolucionarios, que pretenden asemejarse a la realidad popular, pero que no es, ni la realidad, ni las necesidades, ni las condiciones de luchas de las grandes masas explotadas y oprimidas. 

Es tarea, especialmente de los ML, combatir este tipo de frases vacías, porque NO orientan, NO educan, NO organizan, NO invitan a la lucha del proletariado contra la burguesía, del campesinado pobre y medio contra el terrateniente, en sí, el combate de los explotados contra los explotadores. 

Este tipo de frases y discursos falsos, mentirosos, lo que pretenden es desviar la verdadera lucha que lleva la clase obrera organizada contra el capitalista, las diferentes capas sociales contra el imperialismo y el fascismo. 

Así que pretenden, con frases y discursos acomodaticios, DESVIAR la visión de los intereses colectivos, de las luchas colectivas para transformar la realidad de las mayorías. 

Así que atentos a apoyar, a las verdaderas luchas con visión emancipadora de los pueblos del mundo. 

Así que a luchar y a vencer.