Después de algunos años de gobiernos de “izquierda” socialdemócrata, acompañados de la aplicación de programas reformistas, la derecha pro imperialista que estuvo arrinconada temporalmente en algunos países de América latina, inicia una ofensiva, en las últimas elecciones han retomado el control político en Panamá, Honduras y Chile, han fortalecido su posición en Colombia y México con técnicas fascistas de control represivo, mantienen el dominio en Costa Rica y Perú, mientras el Salvador se reencuentra sin desparpajo con la derecha, todo esto nos habla del inicio de un período de avance de la reacción, de la burguesía más radical, del imperialismo. Esta tendencia puede seguir su camino triunfal con las elecciones de Brasil creando cada día un mayor nivel de confrontación regional ya que se van aclarando las posiciones, de un lado proyectos abiertamente burgueses, proimperialistas y reaccionarios, del otro proyectos pequeñoburgueses, socialdemócratas, y reformistas, que en su confrontación luchan por atraer al proletariado y otros sectores de clase explotados para utilizarlos como soporte en sus plataformas electorales.