Esto no es solo la acción de un personaje, loco, inmoral y mafioso, sino que además representa los intereses de una fracción de la burguesía financiera internacional que se ve acosada por la confluencia de la crisis general del capitalismo y sus crisis cíclicas, lo que está llevando las contradicciones fundamentales del imperialismo a extremos.
En su desesperación, esa fracción de la burguesía financiera imperialista trata de resolver la profunda crisis del capitalismo, recurriendo a su alternativa en tiempos complicados: El fascismo y la guerra de agresión.
Los imperialistas saben que la guerra es el mecanismo para tratar de superar las crisis económicas y generar un nuevo ciclo de expansión del capital, debido a que mediante esa acción violenta logran varios objetivos a la vez:
1) Amenazan y someten a sus opositores aprovechando el miedo y la propaganda para tratar de aumentar su control en una operación de reparto del mundo entre potencias imperialistas.
2) Activan la economía por medio de aparato industrial - militar que se coloca al máximo de su producción para sustituir armas, aplicar nuevas tecnologías, renovar industrias, dotar municiones, alimentos, transportes. Destruyen fuerzas productivas para sustituirlas por nuevas.
3) Apropiarse de territorios, recursos y mercados de los países derrotados que además se ven obligados a pagar vacunas a las potencias vencedoras.
4) Iniciar el proceso de “reconstrucción” de los países derrotados por medio de sus créditos y empresas especuladoras, que además de sobreprecio se apropian de recursos locales que transfieren a la potencia imperialista en una transferencia (robo directo) de capital del país oprimido al opresor.
5) llevar a cabo un nuevo ciclo de reanimación capitalista, como ya ocurrió después de la Primera y Segunda Guerra Mundial, nuevo ciclo que da un respiro temporal a la crisis para sumergirse inmediatamente en otra nueva.
Ciertamente, la burguesía propicia las guerras para tratar de superar las crisis, pero también se encuentra con el desenmascaramiento de sus intereses que los lleva a la fascistización de la sociedad y a una agudización muy amplia de la lucha de clases, con la consecuencia de guerras de resistencia, procesos de liberación nacional, revoluciones sociales y en general la movilización de los explotados, principalmente obreros y campesinos contra el imperialismo y el fascismo, tomando en algunas circunstancias, especialmente cuando hay verdaderas organizaciones revolucionarias el camino de la abolición del poder burgués y la propiedad privada de los medios de producción avanzando rumbo al socialismo.
El punto más álgido de la actual confrontación regional en América, en el marco del nuevo reparto internacional del mundo entre bloques imperialistas, ha colocado hoy a Venezuela en el ojo del huracán. El nuevo intento de la burguesía imperialista de EE.UU. por controlar de manera unilateral Latinoamérica se va a resolver por tres vías:
1) Un acuerdo con el bloqueo China - Rusia para repartirse áreas de influencia regionales.
2) Un enfrentamiento armado entre los dos bloques.
3) La decisión de las fuerzas verdaderamente revolucionarias de Venezuela de desarrollarse por la vía autónoma aplicando el “desarrollo endógeno” con alianzas internacionales, pero sin subordinación al capital, lo que amerita organización independiente de clase, un frente popular y un ejército del pueblo dispuesto a librar una guerra larga contra el imperialismo y la burguesía, apoyado en la alianza obrero, campesina, comunal y el pueblo en armas.
Los marxista leninistas de Venezuela siempre fijamos posición desde los intereses del proletariado y confrontamos a la burguesía, asumiendo temporales coincidencias en la política de resistencia y lucha ante la agresión yanqui, sin colocarnos a la cola de ninguna fracción burguesa. Para esto, la política de apoyo crítico con exigencias al proceso bolivariano es la base de la táctica mientras exista la agresión imperialista, acumulando fuerzas de clase para avanzar en la ruta de la liberación nacional y el socialismo científico.
En tal sentido, llamamos a los demócratas, revolucionarios, comunistas y militantes de izquierda a nivel mundial a pronunciarse sin reservas contra la agresión imperialista que amenaza con una guerra de sometimiento al pueblo de Venezuela que resiste y lucha contra la agresión imperialista.
La solidaridad moral, material, en la propaganda y movilización en cada país hacia el pueblo de Venezuela y especialmente hacia los combatientes proletarios que asumimos los planteamientos marxista leninistas y nos preparamos para el enfrentamiento al capitalismo - imperialismo en todos los terrenos, es vital para consolidar la resistencia popular cuando tenemos el honor de ver frente a nosotros a los imperialistas estadounidenses, después de haber derrotado a sus lacayos y títeres.
El PCMLV alerta a todos los militantes y amigos, a los camaradas de lucha en todos los rincones de la tierra ante el desenlace que esta locura guerrerista impulsada por el imperialismo yanqui y los fascistas de todo el mundo pueda tener, dejando en claro que sea cual sea el terreno donde se resuelva esta contradicción contará con los combatientes marxista leninistas de Venezuela en la línea de combate utilizando las tácticas y métodos propios de este tipo de lucha.
De igual forma esperamos ver la solidaridad activa con nuestro pueblo y nuestras organizaciones de masas, así como con el PCMLV.
En el escenario que esta aguda situación avance, pueden contar con que los militantes y amigos de nuestro Partido estaremos dando el mejor esfuerzo para el avance del proletariado revolucionario y del internacionalismo proletario.



















