ANTE LOS AVANCES DEL FASCISMO, LA VACILACIÓN DE LA SOCIALDEMOCRACIA Y LAS DESVIACIONES DEL REVISIONISMO, EL MARXISMO-LENINISMO ESTÁ LLAMADO A AVANZAR REIVINDICANDO EL INTERNACIONALISMO PROLETARIO.
¿Que se juega en América?
Sin duda alguna los bloques imperialistas se encuentran enfrentados en todos los continentes, en unos países implementan la agresión militar, la guerra comercial, y en otros aún la maniobra política, demostrando que la lucha por un nuevo reparto del mundo es un enfrentamiento sin cuartel, donde utilizan todas las formas de lucha mientras los monopolios imperialistas se van repartiendo los mercados y dejan a las burguesías nativas los despojos de los derrotados para satisfacer sus apetitos de sanguijuela.
América latina, que fue el absoluto patio trasero de los EEUU, empezó a debilitar ese papel con el triunfo de la revolución cubana, ampliando la brecha desde la última década del siglo XX cuando Cuba se vio acompañada por procesos de corte democrático, que sin ser verdaderamente revolucionarios, por su carácter y limitaciones eminentemente socialdemócratas, representaron espacios de apertura, especialmente para las mayorías populares que accedieron a beneficios que jamás habían tenido, ni siquiera soñado, además de generar nuevas relaciones comerciales y enfrentar política y militarmente a EEUU.
La fracción emergente de la burguesía nativa ha consolidado sus espacios de poder en la región de la mano del bloque imperialista China-Rusia en pugna contra la burguesía tradicional dependiente del bloque EEUU-UE, lo que les ha permitido amasar grandes fortunas y entrar a jugar en el tablero internacional apropiándose de la propuesta económica Keynesiana y haciendo suyo el planteamiento del Estado benefactor, que producto del impacto de la crisis, ahora no logra dar respuesta a los requerimientos de las masas y pone en apuros a los gobiernos de la socialdemocracia “progresista”, abriendo espacio para difusión de las propuestas del socialismo científico como única opción para las mayorías populares.
Es claro que hay diversas contradicciones en la política imperialista, aquí también ocurren combates de diferente calibre de acuerdo a los países. Podemos decir que Venezuela, Brasil y Nicaragua son en este momento la punta de lanza de la ofensiva del bloque imperialista de los EEUU-UE para desplazar de espacios estratégicos al bloque China-Rusia, que avanzó durante la última década en estas áreas, sin grandes amenazas por parte de los gobiernos yanquis.
El cambio de la política hacia América Latina desde el inicio del gobierno de Trump ha generado una acción agresiva para tratar de volver a controlar totalmente su patio trasero, que se expresa con agudeza en la paralización de los acuerdos que había iniciado el gobierno de Obama con Cuba, las negociaciones con las FARC en Colombia, la ofensiva en Nicaragua, el bloqueo a Venezuela, la arremetida fascista en Brasil, El departamento de Estado ha lanzado con fuerza sus elementos económicos, políticos y militares teniendo como resultado una agudización de las contradicciones a todo nivel, expresión de una agresión que no ha podido triunfar donde se ha mantenido la unidad de las fuerzas revolucionarios, asumiendo de forma consciente o no, las orientaciones de los clásicos del marxismo, que recomiendan la unidad del proletariado en su lucha contra el fascismo y el imperialismo, derrotando al enemigo de clase y las posiciones sectarias o revisionistas que conducen al aislamiento y la derrota como hemos visto en algunos países donde se ha retrocedido desde la socialdemocracia a la derecha neoliberal, y en el caso de Brasil retrocedería al Fascismo, de ganar en la segunda vuelta el candidato derechista.
En Venezuela los acuerdos entre las fuerzas de izquierda para trabajar en conjunto en tareas específicas, conservando las diferencias y contradicciones, así como el derecho a la crítica, manteniendo, en términos generales, la visión de Frente Único para impedir el avance de las fuerzas de derecha, lo que representa una política acertada si se quiere frenar a la reacción y avanzar en la contraofensiva revolucionaria, como hasta ahora ha ocurrido.
En Nicaragua les ha sido difícil a los reaccionarios ganar el apoyo popular de verdad y se han quedado entre los elementos estudiantiles radicalizados, pobladores de la pequeña burguesía, más unos que otro campesino y ecologista, pero en su mayoría las masas populares les han dado la espalda entendiendo que ni el gobierno ni la oposición representan sus intereses.
En Brasil las acciones judiciales para impedir que Lula fuera candidato, con una innegable alta popularidad, forma parte del plan de la reacción para facilitar las cosas al fascismo, ya que esta circunstancia ha llevado al PT a colocar a última hora como candidato a Haddad, que bajo ningún concepto tiene el arrastre de Lula, perdiendo la potencialidad electoral de su candidato principal, llevando a muchas personas a votar por la opción de triunfo al no existir un candidato fuerte de izquierada, además llevó a las fuerzas populares y de izquierda a buscar otros candidatos; lo que por una parte dispersó el voto durante la primera vuelta y de otra ha sido determinante en el aumento de la visión de ventaja del candidato Bolsonaro.
Es innegable que el prestigio del PT se ha debilitado por escándalos de sus altos dirigentes pero sigue siendo la primera fuerza electoral de la izquierda brasileña, por lo que consideramos que esto, como las acusaciones de represor o machista contra el fascista, no es determinante en el resultado porque en procesos electorales de la democracia burguesa ser corrupto o fascista, homofóbico, machista o lesbiana no implica si tienen los recursos para las campañas publicitarias, eso es apenas una curiosidad sobre la que construir un discurso.
Lo que nunca aceptará la burguesía es que sea un representante del proletariado el que pueda llegar al poder en el marco de sus normas, por razones de tipo ideológico y además material, ya que los requisitos económicos de la democracia burguesa le impiden a cualquier hijo del pueblo con conciencia o a un partido proletario tener los recursos para una verdadera maquinaria de propaganda como las que requiere el carnaval electoral y despliega la burguesía en sus elecciones.
Evo, Maduro o Lula a pesar de su origen de izquierda representan ideológicamente a la socialdemocracia, en este caso a su tendencia agrupada en el Foro de Sao Paulo, con claros y profundos nexos con el bloque imperialista China-Rusia y con la burguesía emergente, por lo que debemos estar claros que en este período el imperialismo del bloque EEUU-UE está decidido a golpearlos y sacarlos de juego, no por revolucionarios, sino por la política tan reaccionaria que aplica el gobierno de EEUU y sus monopolios que están recuperando su control en América latina, cobrando un carácter fascista, por lo tanto totalmente intolerante, incluso con sus propias normas “democráticas” las que viola y necesita hacer desaparecer, para imponer sin competencia los intereses de su capital financiero.
El proletariado brasileño ha demostrado hasta ahora tener la claridad política y de clase para no dejarse engañar por discursos de reaccionarios, revisionistas o tránsfugas que llamen a votar por el enemigo de clase o mantenerse “neutrales”, por eso y por la coherencia política de nuestros camaradas marxistas leninistas brasileños tenemos la certeza que sin ninguna duda acumularán fuerzas para la unidad popular a favor de Haddad e impedir así la instauración de un régimen fascista que será perjudicial para toda la región.
El problema de las elecciones brasileñas en este momento es una cuestión de lucha concreta y de fuerza de masas, no se puede medir en términos de formalismos democráticos o legales porque indefectiblemente es necesario el triunfo de Haddad, ya que el otro candidato ha demostrado que ni la ética, ni la democracia ni los intereses populares le incumben y aún así obtiene una altísima votación en primera vuelta. ¿Qué significa eso?.
Que en el análisis político electoral burgués esos temas no son definitorios, e incluso puede decirse que son intrascendentes porque en definitiva en estos casos lo que ha logrado posicionar a personajes de este tipo son las grandes inversiones en publicidad, en muchos casos con amarillismo para posicionar a un payaso de extrema derecha y tratar de hacerlo presidente gracias al sector más reaccionario de la sociedad y a las bajas pasiones, nada tiene que ver esto con ética, es un problema de la lucha de clases y el respaldo que la gran burguesía le da a su candidato propio, porque se han achicado los espacios para la maniobra política socialdemócrata, y la burguesía no quieren compartir el poder, sino tomarlo todo para sí, por eso el proletariado y las masas también requieren una respuesta clasista.
El marxismo-leninismo por intermedio de la Internacional Comunista en su momento, y a través de los análisis de todos los clásicos han definido, sin dudas, lo que hay que hacer en estos casos: Avanzar hacia el Frente Popular, unificar fuerzas y derrotar lo más reaccionario de la sociedad, que es el imperialismo y el fascismo, para después de resuelta esta contradicción, aprovechando el acumulado de la lucha, resolver las contradicciones a lo interno del Frente Popular, jamás dudar, declararse neutral, abstenerse y menos aún colocarse del lado de los intereses de la burguesía financiera ni hacer el juego al imperialismo, el proletariado debe dar el primer paso en la denuncia y enfrentamiento contra el fascismo, así como en el trabajo por la Unidad Popular ganándose el papel de vanguardia en la calle.
Los intereses generales de las mayorías explotadas llaman a fijar posición desde el internacionalismo proletario y no del social-chovinismo, o desde las manipulación de las sectas religiosas, valorando la realidad mundial para comprender que a los oprimidos del mundo les interesa frenar el avance del fascismo en Brasil, o en cualquier país del mundo, para evitarse graves consecuencias en el futuro inmediato y para dar una oportunidad a las ideas avanzadas de la revolución socialista. Por eso es necesario comprender que no es gratuita la Alegría de toda la podredumbre fascista internacional, la afluencia de capitales a la campaña de Bolsonaro y las manifestaciones de júbilo de los elementos más reaccionarios con la manipulación mediática y de las redes sobre la base de inmensas cantidades de dinero.
El PCR y el pueblo de Brasil tienen claro su papel para frenar el avance fascista, por eso desde el PCMLV le auguramos éxito y llamamos a los brasileños conscientes y honestos que viven en Venezuela a salir a votar contra el nefasto Bolsonaro dando el respaldo a Haddad para cerrar las puertas al fascismo y a la violencia reaccionaria que no sólo amenaza a Brasil sino a toda la región y al mundo, por tal razón las acciones de respaldo al pueblo brasileño contra el fascismo como una obligación internacionalista.
Buró Político del Comité Central del
Partido Comunista Marxista Leninista de Venezuela
Caracas, Octubre de 2018.
1 comentario:
El claro preciso y oportuno analisis de la situacion politica en nuestra Amèrica Latina y en particular de Venezuela, nos obliga a darle la mayor difusion a este documento del Burò Polìtico del PCMLV
Publicar un comentario