Elementos de lo internacional
El panorama internacional presenta una agudización de los conflictos en diferentes áreas a saber lo bélico, lo diplomático, lo social y lo económico, propio a su vez de las consecuencias generadas a raíz de la crisis general del capitalismo manifestada en su crisis cíclica, la cual ha trastocado los cimientos de las principales economías del planeta y a pesar de que muchas de ellas muestran leves recuperaciones, se debe tomar en cuenta la afección de las economías dependientes ante la presente crisis.
Los imperialistas a través de sus diversos bloques, continúan incrementando sus acciones para asegurarse los mejores resultados en el reparto del mundo, concentrando su acción en dominar los territorios que poseen importante cantidad de recursos energéticos y minerales apetecidos por ellos, además de aquellas áreas que geográficamente significan posiciones que militarmente pueden tener una importancia estratégica para desarrollar la guerra con importantes posibilidades de victoria.
Pero las agresiones militares contra países y pueblos no se limitan exclusivamente al empleo de fusiles, bombas o armas químicas, sino que también al empleo de otros recursos; en este sentido, hemos visto como los imperialistas han asumido con mayor fuerza la herramienta de los llamados ciberataques, con el propósito de hacerse de informaciones sensibles de sus competidores imperialistas por un lado; por el otro, es utilizada como herramienta para poder sabotear y destruir información de interés que poseen los países u organizaciones que son considerados enemigos, con el propósito de que estos vean entorpecida su efectividad y capacidad de acción en las áreas dónde son saboteados.
Al mismo tiempo los ejércitos imperialistas continúan sus agresiones contra los pueblos de Siria, Yemen, Irak, Afganistán, Donetsk y Lugansk, interviniendo directamente con sus ejércitos en esos pueblos, propiciando masacres contra civiles y destruyendo las fuerzas productivas. En el caso específico de Donetsk y Lugansk la intervención de los ejércitos imperialistas está concentrada en golpear a las fuerzas revolucionarias que luchan por avanzar en la defensa de la construcción del socialismo. Entre todos los conflictos que hoy se desarrollan, el de estas dos regiones situadas en la geografía ucraniana, cuenta con nuestra atención de manera muy especial, por tratarse de una confrontación donde se expresa de manera clara la lucha por el socialismo.
El escenario plantea trabajar de manera acelerada, con precisión, dedicación y firmeza por parte de las organizaciones marxista-leninistas, las cuales tienen ante sí un panorama que dependiendo de nuestra acción como partidos y de las condiciones objetivas de la realidad y las condiciones subjetivas de las masas, puedan significar saltos importantes donde los marxista-leninistas podamos llevar a cabo revoluciones socialistas o democráticas populares, identificando con asertividad la realidad, aplicando el análisis marxista-leninista a las condiciones concretas que nos presenta la realidad.
Todo este trabajo no es sencillo, pues además de las agresiones con cañones y fusiles de los ejércitos imperialistas contra los pueblos, estos emplean laboratorios de propaganda que confunden y dispersan a las masas. Adicionalmente, los reformistas y revisionistas de todo tipo, con sus acciones, terminan fortaleciendo y ayudando a las posiciones más reaccionarias. La socialdemocracia, timorata y dudosa en sus posiciones y acciones para enfrentar las consecuencias de la crisis del capitalismo, se muestra débil ante la arremetida de las organizaciones fascistas, las cuales ven la posibilidad de avanzar engañando a las masas con posibles salidas, que no son más que distractores; pero además con sus acciones de agresiones contra los revolucionarios consecuentes intentan sembrar miedo e incertidumbre entre las organizaciones populares para frenar su acción.
Las manifestaciones de las crisis del capitalismo y sus consecuencias, crean las condiciones para cambios profundos en la sociedad. Pero estos cambios no siempre son revolucionarios, a veces se expresan en triunfos de las fuerzas reaccionarias de la sociedad, tomando forma en gobiernos de ultraderecha, los cuales imponen medidas en todos los ámbitos para combatir a las fuerzas revolucionarias, incluso a las expresiones democráticas más amplias, significando esto un gran obstáculo para las organizaciones que luchan por el socialismo. Por tal razón en las actuales situaciones, los marxista-leninistas debemos estar atentos y preparados para orientar a las masas en general y al proletariado en particular para marchar victoriosos en la lucha.
El asesinato del embajador ruso en Turquía
El asesinato del embajador de Rusia en Turquía Andréi Karlov demuestra la agudización de las contradicciones en el escenario político y económico mundial. Es claro que este asesinato no fue una acción aislada de un fanático religioso. Tal vez seamos testigos una vez más de una táctica imperialista para acelerar futuros escenarios de guerras. Así como el asesinato de Francisco Fernando, archiduque de Austria-Hungría en Bosnia fue la excusa usada por el imperialismo para detonar formalmente las agresiones por el reparto del mundo en 1914, este hecho es un elemento que puede ser utilizado como catalizador por parte de los imperialistas para seguir promoviendo los conflictos en la actualidad.
Es necesario estar atentos a los próximos acontecimientos, pues las campanas de la confrontación imperialista siguen resonando con fuerza, y los pueblos deberán organizarse revolucionariamente para aprovechar los escenarios y avanzar, para lo cual será importante la dirección clasista de los partidos marxista-leninistas.
La crisis y algunas expresiones del reacomodo de los capitalistas
En las crisis también se agudizan las contradicciones entre las diferentes expresiones de la burguesía, los grupos monopólicos mueven sus recursos e instrumentos, con esto buscan reacomodarse en su intención de favorecer a sus intereses particulares, dominar los territorios considerados estratégicos, manifestándose este fenómeno también en las expresiones de la actividad política. Esto lo podemos evidenciar con mejor precisión en el desarrollo de algunos conflictos que se han presentado en el contexto mundial, algunos de ellos vinculados específicamente a la actividad parlamentaria o de elecciones burguesas. Por ejemplo, la aplicación de la destitución por vías legales de Dilma Rousseff en Brasil, la destitución vía referendo del primer ministro italiano, la destitución de la presidenta de Corea del Sur por parte del parlamento, el triunfo de Donald Trump en los EE.UU., incluso en Venezuela con la pugna constante entre la mayoría de la Asamblea Nacional y el Tribunal Supremo de Justicia, hemos visto los mecanismos utilizados de parte y parte para tratar de imponerse ante el adversario.
Esto evidencia con más claridad cómo se pueden manifestar las expresiones de la lucha interburguesa. Pero además, la misma burguesía hace propaganda para imponer conclusiones como que la llegada al poder de personajes de diferentes agrupaciones partidistas independientemente de su origen de clase, puede significar un cambio esencial y de contenido para la sociedad que lo experimenta. Durante las campañas electorales o procesos judiciales contra mandatarios, observamos cómo los diferentes actores involucrados, entre ellos se degradan discursivamente, utilizando los términos más ofensivos, formando con esto un show mediático que distrae a las masas. Sin embargo, a pesar de todos los ataques verbales, políticos y económicos que pueden desarrollar en sus diferentes formas los partidos burgueses o pequeño burgueses, ninguno de ellos busca destruir los cimientos del Estado burgués, todo lo contrario, termina reforzándolo y perfeccionándolo.
Debemos analizar con mejor precisión el significado del triunfo de Donald Trump en los EE.UU. Mucho se ha analizado acerca de este acontecimiento que tiene como protagonista a “un hombre que logró sobreponerse a la dictadura de los medios”. Nada más alejado de la realidad, pues Trump es un multimillonario con inmensa influencia y poder, además de poseer y controlar poderosos medios de comunicación, de ahí que pudiera desarrollar su campaña gastando millones de dólares. Su fortuna según la revista Forbes asciende a 3.700 millones de dólares*. Lo que vimos en el proceso electoral estadounidense es un ejemplo de cómo intenta reacomodarse la burguesía para las circunstancias actuales. Pero además demuestra cómo, parte de los sectores populares son presa fácil de la demagogia burguesa, pues a pesar de ser una campaña catalogada entre las más sucias y carente de propuestas, en las urnas electorales se presentaron una cantidad de votantes sin precedentes en los últimos 50 años.
No debemos olvidar lo que venimos señalando en anteriores líneas, se trata de las manifestaciones de las contradicciones interburguesas. Trump pertenece a un grupo de la burguesía relacionado con el negocio de las inmobiliarias, hoteles, casinos y cárceles, recordando que en los EE.UU. hay inmensa cantidad bajo administración privada. Hilary Clinton, la ex candidata demócrata, está vinculada a otros grupos económicos relacionados con la industria militar, de seguridad, entre otros. Los dos son fieles exponentes de los monopolios imperialistas, los dos expresaron el grado de descomposición propio de la burguesía.
El panorama político de América Latina
Nuestro subcontinente experimenta cambios que transcurren de manera acelerada. En los últimos meses, las fuerzas de la derecha avanzan y aprovechan el debilitamiento de los gobiernos considerados de izquierda. Este avance derechista se debe, en gran parte, a las inconsecuencias políticas develadas por estos gobiernos, además de la corrupción creciente que se hace inocultable ante los ojos de las masas. Este aprovechamiento se manifestaba en la recuperación de parte del terreno perdido en lo político, a través del triunfo por la vía electoral y parlamentaria principalmente, pues claro está, el dominio económico siempre lo conservaron en gran medida.
Sin embargo es muy importante que no obviemos que todos estos hechos se han desarrollado en el marco del impacto profundo de la crisis del capitalismo en nuestra región, este es un elemento central en nuestro análisis. Las principales economías de América Latina han sido golpeadas como ya preveíamos en nuestros anteriores documentos de análisis y orientaciones, todo esto producto de la dependencia económica con respecto a los imperialistas. Estos últimos meses, el movimiento de los monopolios en torno a nuestra región ha dejado en evidencia la agudización de las pugnas imperialistas por asegurarse las mejores condiciones en el dominio económico y político sobre estos territorios.
El crecimiento del producto interno bruto de América Latina se ha visto impactado por esta crisis. En primer lugar, las proyecciones del crecimiento económico se han concretado con resultados que están por debajo de estas. Las economías latinoamericanas han experimentado un “crecimiento negativo”**. La CEPAL, organismo de la ONU que analiza el comportamiento económico de los países de la región asegura que su economía se contraerá en un 0,8% para final de este 2016. Para tratar de reponerse de las consecuencias de la crisis, algunos gobiernos han tomado medidas económicas abiertamente neoliberales, lo que trae como consecuencia inmediata la reacción de las masas populares. Entre estas reacciones encontramos las crecientes manifestaciones callejeras, rechazando así las pretensiones de los gobiernos respectivos de imponer medidas que sólo buscan fortalecer a los intereses del capital.
Estas expresiones de lucha de los pueblos pueden ir en ascenso de manera acelerada, por tal situación los marxista-leninistas debemos hacer mayores y mejores esfuerzos para que nuestra influencia en las masas sea decisiva, con capacidad de dirección, para motivar a las masas luchar hasta las últimas consecuencias.
Colombia
Una de las noticias que ha ocupado parte de la atención de las principales agencias de noticias, ha sido la decisión de las FARC-EP de dejar formalmente la lucha armada para transformarse en una organización política. Los revolucionarios marxista-leninistas, ante estos hechos mostramos nuestra profunda preocupación, pues sabemos que la burguesía no tiene voluntad alguna de disminuir su ofensiva en contra la organizaciones revolucionarias. Todo lo contrario, las fuerzas militares imperialistas han incrementado sus acciones y gastos con el propósito de fortalecerse y prepararse para acciones de control de los mercados y recursos de los pueblos.
Es claro que no todos los guerrilleros de las FARC-EP están dispuestos a entregar las armas, pues saben que sería un suicidio asumir los “compromisos de paz” que pregona la burguesía. Tal y como se desarrolla la realidad, ésta indica que los imperialistas arreciarán en las actividades por el reparto del mundo, esto a su vez les llevará a hacer lo necesario para eliminar cualquier posición de resistencia, tarea que le será mucho más fácil si las fuerzas revolucionarias no cuentan con una capacidad militar para defenderse y a su vez, desarrollar la ofensiva.
Además, es necesario evaluar los aspectos del impacto psicológico, social y político que ha generado en los pueblos estas decisiones anunciadas por las FARC-EP, pues el escenario ha sido aprovechado por la propaganda burguesa para decir que los pueblos deben renunciar a la lucha revolucionaria, que la misma no vale la pena; aseveraciones malintencionadas que deben ser enfrentadas no solo con palabras, sino en la realidad; tarea para la cual el partido marxista-leninista está llamado a jugar un papel de primer orden.
Brasil
Luego de concretar la destitución de Dilma Rousseff por vías propias de la democracia burguesa, (las mismas que fueron utilizadas por ésta para llegar hasta la presidencia) el gobierno de Brasil fue asumido de manera formal por Michel Temer, el cual no perdió tiempo en implementar medidas abiertamente neoliberales, contemplando la eliminación de los subsidios y programas sociales. Esto significó la agudización de las contradicciones en lo político y social, llevando a las masas a tomar las calles de importantes ciudades para manifestar su descontento.
La situación vivida por el pueblo brasileño en los últimos meses, confirma las deficiencias y limitaciones de los socialdemócratas para llevar a cabo transformaciones en favor de las mayorías explotadas y oprimidas. El gobierno de Rousseff contaba con importante apoyo, pero sus propias inconsecuencias con los intereses de los trabajadores, además de la evidente corrupción institucional, establecieron el terreno ideal para que otros factores políticos asumieran el control de la presidencia. Que hoy la derecha más reaccionaria esté al mando del gobierno en Brasil, requiere que las fuerzas populares entiendan que la lucha es por avanzar hacia un gobierno realmente revolucionario, además de entender la necesidad de pelear la dirección a las posiciones reformistas y revisionistas que tratan por todas las vías de desviar la atención de las mayorías de sus reales intereses de clase.
Es por eso que ante un pueblo que sale a decirle no a las medidas antipopulares de Temer, los marxista-leninistas deben prepararse para dirigir la lucha revolucionaria en un país en el que es vital para el imperialismo mantener el más férreo control.
Venezuela
En nuestro país claramente las contradicciones de clase se han agudizado, aunque es importante tener en cuenta que debido a la capacidad de maniobra de los elementos socialdemócratas y oportunistas, tanto en las filas del gobierno y la oposición, se ha logrado apaciguar por momentos las profundas molestias causadas en el seno de las masas por los efectos de la crisis económica, en la cual se agudizan situaciones como el acaparamiento y la especulación, acciones sustentadas y desarrolladas por la burguesía vinculada al capital financiero y comercial, apoyándose para esto en elementos vinculados en las mafias paramilitares y las llamadas bandas criminales.
Las propuestas realizadas por el gobierno para superar la crisis son vistas con mucho recelo por una importante parte de la población, la cual está afectada por el estrés diario de tener que resolver los problemas más básicos en condiciones muy negativas, donde los productos básicos son muy difíciles de obtener, bien sea porque están escasos, o bien porque cuando se consiguen los precios son tan altos que no hay posibilidad de adquirirlos.
No debemos olvidar que la burguesía es una clase y como tal se comporta para defender sus intereses. En este sentido, puede accionar en espacios de gobierno o de la oposición, utilizar las estructuras institucionales para afianzar organizativamente el dominio y su influencia en las amplias masas. Por ello, es importante ver el desarrollo de un comportamiento que crece el en seno del pueblo el cual se expresa en el rechazo a las propuestas políticas que se identifican con gobierno u oposición por considerar a ambas inútiles para solventar de manera efectiva la situación. Si revisamos el problema desde el punto de vista de clase, podemos decir que tanto el gobierno como oposición realizan propuestas que no responderán a las necesidades del proletariado y las mayorías populares de manera esencial. Saber leer de manera acertada esta contradicción que se nos presenta en la actualidad, para darle el tratamiento acertado, es de vital importancia para las aspiraciones del partido marxista-leninista de orientar y dirigir a las más amplias masas en nuestro país.
Estos momentos permiten apreciar de mejor manera la descomposición de la socialdemocracia, que se refleja también en una política populista y oportunista cada vez más descarada. Esto se desarrolla en una realidad cada vez más negativa para la mayoría de la población, que cada vez está más decepcionada, además de la incertidumbre creciente del pueblo trabajador, que no ve la posibilidad de salir de la problemática, al menos en el corto plazo. Este fenómeno que se manifiesta en las masas, las hace más sensible a las propuestas de los factores mafiosos y oportunistas, quienes con su actividad, han logrado enquistarse entre las masas, logran dar una impresión de tener respuestas inmediatas a los problemas más sentidos, cuestión que como sabemos es falsa.
Las últimas medidas del gobierno son una muestra peligrosa de improvisación.
El gobierno nacional ante la situación generada por la falta de billetes de 100 bolívares, tomó unas acciones que podemos catalogar de drásticas. Oficialmente el anuncio fue hecho con el basamento central de contrarrestar la acción de las mafias que venían asumiendo desde hace años acciones para acumular en sus manos el billete de mayor denominación de nuestro cono monetario. Frente a esta realidad, el ejecutivo tomó la decisión de dejar fuera de circulación el mencionado billete, lo que causó entre otras cosas revuelo, molestias e incertidumbre en un número importante de la población. Esto se agudizó por toda una serie de acciones generadas por agentes de la misma banca pública y privada; expresada en el maltrato, desinformación y acciones para ralentizar las operaciones de depósitos o cambios. Luego, el gobierno nacional, asumiendo que se había logrado recoger suficiente cantidad de billetes, gracias a las medidas económicas asumidas, anuncia la entrada en vigencia nuevamente del billete de Bs. 100 hasta el 2 de enero. Esto generó un descontento mayor en gran parte de la población. Se deja ver la gran improvisación por parte del gobierno para dar respuestas a las situaciones que se les van presentando. Esta improvisación es a su vez expresión de las debilidades orgánicas grupo reformista que maneja el poder en Venezuela.
Es claro que si queremos golpear al enemigo de clase, no lo haremos con fuerza simplemente sacando de circulación una determinada denominación monetaria, para esto se necesitan acciones más enérgicas, por lo cual una vez más decimos que ante el saboteo de la banca, debemos avanzar con la nacionalización de la misma. Debemos quitarle el control financiero a quienes son nuestros enemigos de clase, es decir a la burguesía. Mientras no lo hagamos, seguiremos a merced de ellos.
La socialdemocracia tomando cuerpo en el gobierno y la oposición, ha desarrollado su accionar en los últimos momentos llamando a la reconciliación, concretando pactos entre sí, cuyas consecuencias sufren la mayoría explotada y oprimida. Por ejemplo, luego de la implementación de los diálogos gobierno y oposición, el precio de los alimentos sufrió una elevación descarada y poco a poco fueron formalizándose, hasta llegar a ser parte del llamado “precio justo”. Las instituciones gubernamentales se han limitado a aprobar resoluciones, a hacer denuncias que no cuentan con las consecuentes acciones revolucionarias. Se frena, se llama a los obreros y campesinos a abordar planes y ejecutar las orientaciones del gobierno, pero no pocas veces se ha colocado a la cabeza de las mismas a burócratas y corruptos que tienen como objetivo central sus beneficios propios. En otras palabras, gobierno y oposición se han dado la mano.
El gobierno y las fuerzas populares reaniman sus fuerzas
Por otro lado, el partido de gobierno (PSUV) ha reanimado sus fuerzas, demostrando una buena capacidad de movilización y de propaganda. Pese a que esta organización no tiene la misma fuerza de hace algunos años, es necesario entender que aún su influencia en el entorno popular y revolucionario es importante, precisamente por contar con los recursos institucionales. Su capacidad de convocatoria es la más grande del ámbito nacional. Sin embargo, una importante cantidad de sus dirigentes son factores que promueven el oportunismo, el diversionismo ideológico y contribuyen a la proyección de una imagen negativa de lo que es el socialismo entre las más amplias masas. Todo lo anteriormente descrito hace que la decepción popular crezca, aumentando el grado de complejidad para el trabajo político revolucionario en el seno de las masas.
La situación actual sumamente difícil, exige que las organizaciones revolucionarias pongan a prueba sus fortalezas y superen las debilidades. Los socialdemócratas hacen todo lo necesario para concretar la conciliación de clase, para llegar a acuerdos donde el botín a negociar sean los intereses de las mayorías. Por otro lado los factores fascistas también incrementan su accionar contra las posiciones populares revolucionarias, muestra de esto es el aumento de los ataques y asesinatos selectivos que se perpetran en diferentes estados del país.
Ante esto, a los revolucionarios consecuentes se le impone la tarea de cualificar más su accionar, esto pasa por desarrollar con mejor disciplina la formación política e ideológica, la labor de organización y reclutamiento para concretar el crecimiento y consolidación de nuestro partido, obedeciendo así a la consigna central que nos ha orientado el III Congreso (2013): ¡Por la consolidación de las estructuras y el crecimiento del Partido!
Tenemos la tarea de ser más precisos y certeros en cada uno de nuestros análisis. Debemos verificar con rigurosidad científica las situaciones que planteamos como conclusiones en los diversos espacios del partido.
¡Emulemos la grandiosa e histórica acción de los bolcheviques!
¡Por la consolidación de las estructuras y el crecimiento del partido!
Comité Central del PCMLV
Caracas, diciembre de 2016
** Eufemismo utilizado en la economía burguesa para referirse a pérdidas o estancamiento económico.
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