EL PARTIDO M-L, LA PROPAGANDA Y LAS MASAS

Para Lenin, la propaganda era el nexo del partido con las masas. Por medio de la propaganda y la agitación el partido ejercía influencia política entre la mayoría de los obreros y campesinos; llevando el partido su programa, líneas políticas, resoluciones opiniones y puntos de vista impulsando la educación de todo un pueblo; dando además, una ardua lucha contra los oportunistas, impulsando la gran tarea de concientizar a los obreros en trascender la lucha economicista a una lucha política decidida contra los enemigos imperialistas; en fin, organizar y orientar la revolución. Este último hecho no hubiese sido posible, sin cumplir una de las tareas fundamentales como la propaganda.

Es preciso mencionar que, a inicios del siglo XX en el desarrollo de la primera guerra mundial, los revolucionarios no contaban con suficientes herramientas para la propaganda y la agitación como en la actualidad; contaban apenas con las impresiones en condiciones clandestinas de volantes, periódicos y afiches. Requerían de grandes esfuerzos para llevar a cabo la difícil tarea de educación de las masas, pero que los mismos se convirtieron en los medios masivos por excelencia para dirigirse a la población y elevar el espíritu de lucha a muerte antes y después de la revolución. 

En la actualidad, nos encontramos con fuertes contradicciones interiimperialista y es necesario el reimpulso de la propaganda por los comunistas Marxistas Leninistas, para evitar (en algunos casos) la desmoralización, las desviaciones ideológicas, confusiones y levantar el ímpetu y continuar dando cumplimiento a nuestras responsabilidades. En cuanto a las masas, llevar a cabo las movilizaciones y concentraciones de protestas y exigencias contra el enemigo común, el imperialismo, la burguesía y sus lacayos.

A través del tiempo, pasando por dos guerras mundiales, la propaganda ha tomado rápidamente mayor importancia desde el carácter de la lucha de clases. Y tanto el imperialismo como los revolucionarios, nos hemos hecho de las nuevas herramientas para mayor contacto con las masas. 

Cada clase social hace propaganda de acuerdo a sus intereses económicos, filosóficos, políticos, morales, sociales etc. En el caso de la burguesía y el imperialismo impulsan sus publicaciones comerciales y además de los elementos anticomunistas. Nosotros los revolucionarios nos proponemos ganar a las amplias masas a la revolución proletaria; por eso es de suma importancia para los partidos Marxistas Leninistas darle a la propaganda el impulso requerido y necesario.

Construcción de las estructuras territoriales

La propaganda no es posible sin los aportes constantes de información e investigación de toda la militancia del partido y sus colaboradores. Es otra de las obligaciones de los comunistas: alimentar las manifestaciones políticas con un flujo continuo de noticias de todos los sectores sociales. En la unión soviética cada célula funcionaba como una antena de información, los diarios estaban conformados por múltiples "corresponsales populares" ubicados en todos los niveles de las actividades del país. Ese trabajo de información es para la propaganda comunista un indiscutible elemento que nos permitirá, en particular, reaccionar mucho más rápido que las propagandas adversas, desconcertarlas y, a menudo, adelantárseles.